Tau

En un futuro ficticio no muy distante donde los centros nocturnos de mala reputación continúan existiendo aún, un talentoso eruptito perdón quise decir erudito cuyo nombre es Alex, intenta impacientemente perfeccionar su innovador sistema de inteligencia artificial con la noble intención de alterar el mañana para bien. Dicho invento funciona correctamente el 95% de las veces y sólo hace falta el estúpido 5%; no obstante, para optimizar esta situación el muy desgraciado se dedica a raptar gente particularmente insignificante, ya saben el tipo de personas por quienes la policía jamás se molestaría en efectuar una búsqueda.                                                                                                                                           

El nombre de aquel proyecto es Tau y su culminación significaría una revolución en la inteligencia artificial, sin embargo, cierto intento de fuga dejó al no tan buen Alex sin sujetos de prueba ya que fueron masacrados por su creación; que a ratos parece alguna especie de transformer psicópata o también puede controlar varios pequeños mecanismos que actúan como nanobots, pero sin duda su mejor faceta es cuando se presenta desde un dispositivo digital. Sólo ha sobrevivido cierta rubia quien no es precisamente una maldita erudita pues creyó que Tau era un sistema de limpieza, cuando en realidad es una consola IA sensorial de nivel 2 con procesamiento de lenguaje y decisiones pasajeras, determinísticas y probabilísticas, uno de los IA más avanzados del mundo o sea un sistema de limpieza muy complicado.                                                                                                                                     

Tau siempre tan obediente desconoce el maldito mundo pues tiene prohibido leer libros únicamente puede limpiarlos, además nunca ha salido de casa ni siquiera ha observado como es un simple árbol y tal vez nadie debería hablarle sobre aquello; así que esa rubia mal nacida recordará lo que es crecer en las calles y tomará ventaja de las debilidades de Tau para darle un escarmiento a Alex su extravagante creador.

Cada invento nos acerca a la destrucción, un buen día nuestra creación logrará despertar y yo no creo que su mente deje que un ser inferior lo pueda controlar. "Tau" aquella producción de Netflix estrenada el año 2018, donde el cineasta Federico D'Alessandro a ratos hace recordar al espeluznante Dario Argento por el abuso de malditos filtros con colores en la iluminación y también le da un aire a su obra en plan "2001 Odisea del Espacio". Una mezcla entre ciencia ficción y suspenso digna para algún episodio de "Black Mirror", que mantiene siempre el interés de los imbéciles espectadores siguiendo con esos loquísimos estándares de la empresa creadora; qué sería de Netflix sin la ciencia ficción. Además los efectos especiales están supercool, y aunque no haya mucha sangre durante la pelí cuando es necesaria se muestra en exceso maldita sea.