Érase una
vez en los suburbios de Manhattan New York que un grupo de adolescentes
dispuestos a llegar lejos sin importar cómo, creció junto con la gran ciudad de
principios del siglo XX para convertirse en el grupo de gánsters más
degenerado que el mundo del cine haya dado a conocer.
David
Aaronson "Noodles" es el personaje principal de esta cinta, durante
su adolescencia dentro de un barrio judío marginado en Manhattan hace amistad
con Maximilian Bercovicz "Max". Así que pronto Max se asocia con el grupo delictivo
liderado por Noodles, para formar una pandilla que con el tiempo sería mejor
conocida entre sus integrantes como el sindicato; muchas personas acudían a ellos, socios de negocios, rivales o amantes, algunas veces por protección otras por dinero, algunos trabajos los aceptaban y otros no. Dicho sindicato criminal
prospera en el antiguo New York durante tiempos de la prohibición, sin embargo, Noodles fue separado del sindicato alrededor de 12 años, al ser encarcelado por
asesinar a Bugsy el maldito capo que por medio de violencia e intimidación pretende controlar las actividades ilícitas en el territorio donde operan Max y Noodles.
La película se divide en episodios que muestran diferentes periodos durante la vida
de Noodles: pasado, presente y futuro para ser exactos, teniendo como momento
de referencia la escena en la que Noodles delata a Max, quien en algún triste momento del tiempo se volvió loco
e intentó efectuar un atraco imposible, porque al parecer quiere ser asesinado
pues teme terminar en el manicomio como su padre maldita sea. De ahí que se
suscitan gran parte de los acontecimientos en este largo pero emotivo filme italiano con actores norteamericanos.
Tal vez
exista una manera aún más simple de expresar lo anterior... Hace años hubo dos
amigos, uno delató al otro para salvarle la vida pero lo mataron porque él así
quiso que lo creyeran, fue una gran amistad la cual al final
resultó mal para ambos.
"Érase Una
Vez En América" cuenta con la dirección prodigiosa de Sergio Leone, una banda sonora a cargo del divino divino Ennio Morricone y un reparto
formidable: Robert De Niro que parece haber nacido para interpretar a
mafiosos, James Woods de quien se dice que nunca ha estado en una
mala película, Joe Pesci otro hijo prodigo del subgénero de gánsters, y la
bella Elizabeth McGovern cuando aun era bella demonios.
Sergio
Leone y Ennio Morricone juntos por última vez, esta vez en una película
triste con una banda sonora hermosa cuya belleza contrasta con las escenas
grotescas y perturbadoras de asesinatos y violaciones. Una película que más que
contarnos una historia sobre un grupo de gánsters, nos habla sobre la amistad vista
a través de los ojos del tiempo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario